jueves, 8 de diciembre de 2016

La chica del tren

El tren de las 8.04 de Ashbury a Euston hace una parada para conocer a Rachel.


Título: La chica del tren
Título original: The Girl on the Train
Autor: Paul Hawkins

¿Estabas en el tren de las 8.04? ¿Viste algo sospechoso? Rachel, sí.

Rachel toma siempre el tren de las 8.04 h. Cada mañana lo mismo: el mismo paisaje, las mismas casas… y la misma parada en la señal roja. Son solo unos segundos, pero le permiten observar a una pareja desayunando tranquilamente en su terraza. Siente que los conoce y se inventa unos nombres para ellos: Jess y Jason. Su vida es perfecta, no como la suya. Pero un día ve algo. Sucede muy deprisa, pero es suficiente. ¿Y si Jess y Jason no son tan felices como ella cree? ¿Y si nada es lo que parece?

Tú no la conoces. Ella a ti, sí.

A ver, ¿cómo empiezo esto? Los puntos fuertes... hummm... el libro es entretenido. Y ya, no tiene mucho más que le salve.

Cuando salió este libro me llamó bastante la atención por todo el revuelo que se montó a su alrededor. Prometía ser un thriller bastante bueno y me picó. Como una no puede leer todo lo que le llama la atención, lo dejé pasar, pero ayer vi que el libro había llegado a casa y me dije "esta es la mía", así que me puse a leerlo y ahora os lo cuento.

Para empezar, la narración es pesada y no anima a leer precisamente. La protagonista es bastante patética y más que empatizar con ella me daban ganas de darle de hostias para que espabile. Los personajes son completamente planos y lo único que se puede llamar evolución se basa en el desconocimiento.

Y, por favor, ya me he enterado de que Rachel está gorda, dejad de repetirlo cada cinco minutos, que es absolutamente innecesario y queda muy forzado.

Oh, sí, y la autora ha querido jugar a ser Conan Doyle impidiendo que el lector descubra al asesino (que, aún así, se puede imaginar) con la simple técnica de no dar las pistas suficientes. Pero, claro, no todo el mundo puede ser el creador de Sherlock Holmes y, no, no queda bien.

Como ya he dicho, de lo poco bueno que tiene el libro es que es entretenido, pero también tiene otro punto a su favor: la estructura de la narración. Es distinto a lo que estamos acostumbrados, aunque se está volviendo cada vez más común, el ir alternando personajes y seguir un orden no cronológico. ¿Estamos ante un nuevo tópico?

En resumen, que no recomiendo este libro, pero no voy a impedir a nadie leérselo.